COMPLEMENTOS.
Los complementos juegan un papel fundamental en torno a la moda flamenca. Destacan sobre manera los fajines de diversos tejidos y las chaquetillas en todas sus formas -incluida la vaquera_ para acompañar al traje de faralaes, como las de la creadora Loli Vera, o aquellas más livianas y elegantes en gasa de lunares como las presentadas por Lina. También protagonizan un papel importante las mantillas, mantones y mantoncillos, en todos los largos y colores, bordados y pintados a mano, de todos los tejidos, destacando especialmente los artesanales de Rocío Casado para la colección de Ángeles Verano o los de Pitusa Gasul, sin olvidarnos de los mantones de factura artesana de Ángeles Espinar, cargos de sensualidad y coquetería.
En cuanto al resto de los complementos, atrás quedaron aquellos en forma de bolas que nada aportaban al vestido de flamenca, los collares, pendientes, pulseras, peinetas, peinecillos, anillos e incluso broches son hoy parte esencial en el acabado perfecto del conjunto flamenco. Destacan los de Dublos y Luchi Cabrera que ponen a todos los trajes el buen gusto que el uso de los nuevos materiales le permiten. Cargados de barroquismo y fantasía, abundan los collares largos y muy realizados en todos los colores, lisos y combinados, los complementos realizados en materiales nobles y clásicos, como el coral natural, el nácar o la turquesa, pero también los de laboriosidad de orfebre, con aires art-decó, enrejados y motivos vegetales o con cristales de colores y pedrería. También en materiales de pátina metalizada, en plata y oro, o con monedas zíngaras.
En cuanto al resto de los complementos, atrás quedaron aquellos en forma de bolas que nada aportaban al vestido de flamenca, los collares, pendientes, pulseras, peinetas, peinecillos, anillos e incluso broches son hoy parte esencial en el acabado perfecto del conjunto flamenco. Destacan los de Dublos y Luchi Cabrera que ponen a todos los trajes el buen gusto que el uso de los nuevos materiales le permiten. Cargados de barroquismo y fantasía, abundan los collares largos y muy realizados en todos los colores, lisos y combinados, los complementos realizados en materiales nobles y clásicos, como el coral natural, el nácar o la turquesa, pero también los de laboriosidad de orfebre, con aires art-decó, enrejados y motivos vegetales o con cristales de colores y pedrería. También en materiales de pátina metalizada, en plata y oro, o con monedas zíngaras.
No hay comentarios:
Publicar un comentario